La historia de la literatura está llena de autores que tuvieron que refugiarse en otros países, ya fuera para huir de la guerra o a causa de sus convicciones políticas o religiosas. Muchos de estos artistas exiliados no sólo escribieron sus más importantes obras lejos de su lugar natal, también se vieron obligados a escribir en una lengua distinta a la materna. Aquí te recomendamos 5 autores refugiados que no puedes perderte.

1. Bertolt Brecht

Bertolt Brecht fue uno de los dramaturgos y poetas más importantes del siglo XX. Nació en Alemania en 1898 y a muy temprana edad se dio cuenta de que sus tendencias ideológicas no coincidían con las de su familia ni sus compañeros.

Fue médico de guerra durante la Primera Guerra Mundial, donde aprendió a odiar los conflictos bélicos y comenzó a escribir obras de teatro. A partir de este momento, llenó sus creaciones de pensamientos marxistas, que estudiaba con dedicación.

Debido a sus tendencias ideológicas y políticas, que nunca dejó de manifestar a pesar de no pertenecer a un partido político, fue perseguido desde el momento en que Hitler subió al poder. Esto inició un largo exilio que lo llevaría por Dinamarca, Suiza y Estados Unidos, de donde también fue exiliado. Regresó a Suiza y pasó a Alemania Oriental donde murió finalmente.

Gracias a su cualidad de nómada obligado escribió su obra en muchísimos pa��ses diferentes. Durante sus exilios, su estilo de escritura cambió gradualmente, y la mejor manera de apreciarlo es adentrarse en su teatro completo que incluye clásicos como “Madre Coraje y sus hijos” y “El círculo de tiza caucasiano”.

2. Mario Benedetti

Debido a las dictaduras militares que sufrió América Latina durante el siglo XX, existe una amplia lista de autores refugiados. Entre los más famosos se encuentra el escritor uruguayo Mario Benedetti, conocido principalmente por sus poemas amorosos.

Sin embargo, buena parte de su obra más profunda y disruptiva se encuentra en producciones políticas que criticaron al sistema de forma implacable. Fue activamente izquierdista; formó parte de los fundadores del Movimiento de Independientes 26 de Marzo, cuya guerrilla urbana se rebeló contra la ultraderecha uruguaya.

Por esta razón, cuando comenzó la dictadura cívico-militar de Juan María Bordaberry, Benedetti huyó a Buenos Aires, posteriormente a Perú y finalmente a Cuba. Logró regresar a Uruguay donde pasó los últimos años de su vida.

Durante sus años de exilio escribió una de las obras más importantes para las dictaduras latinoamericanas: Pedro y el Capitán, donde narra, de forma cruda y poética a la vez, un interrogatorio, profundizando en la psicología e ideología no sólo del torturado, sino también del verdugo. Es una obra fundamental para comprender el contexto histórico de Latinoamérica en el siglo XX.

3. Isaiah Berlin

Isaiah Berlin fue uno de los principales representantes del liberalismo del siglo pasado. Su historia en el exilio es un poco distinta a la de los dos autores anteriores, debido a que su familia salió huyendo de su natal Livonia por la Revolución Rusa cuando él apenas era un niño. Creció y vivió toda su vida en Inglaterra; abandonó su lengua materna para filosofar y escribir exclusivamente en inglés.

A pesar de que se volvió un refugiado a muy temprana edad y que pareciera que toda su vida estuvo caracterizada por la tranquilidad de tener una nacionalidad nueva, en realidad los conceptos políticos de libertad, individuo y guerra guiaron todo su pensamiento.

Es un autor fundamental para poder comprender cuáles son las dinámicas que existieron en el liberalismo. Si te interesa aprender más sobre esta ideología, Dos conceptos de libertad es la obra adecuada para lograrlo.

4. Samuel Beckett

Con seguridad has oído o leído alguna obra de Samuel Beckett. Es uno de los escritores más importantes de la historia. Entre sus creaciones más famosas se encuentra la renombrada obra de teatro Esperando a Godot.

Beckett nació y creció en Irlanda, donde mantuvo una relación estrecha con James Joyce. Cuando alcanzó la adultez comenzó a mudarse a otras ciudades, como Londres, donde sufrió de la discriminación de la que eran víctima los migrantes irlandeses.

Después de volver a Irlanda y tener grandes discusiones familiares, decidió mudarse definitivamente a Francia, a pesar de estar en guerra; incluso participó en ella durante varios años.Tomo tal decisión a causa de la gran censura de la que fue víctima en Irlanda, donde sus textos eran tachados de obscenos.

En Francia tuvo la oportunidad de crear a sus anchas. Escribió gran parte de su producción artística en francés y tradujo sus propios libros, como es el caso de Los días felices. A pesar de no ser un exiliado perseguido por su gobierno, sí tuvo que migrar a causa de la censura.

5. Nguyễn Phan Quế Mai

La literatura contemporánea también tiene representantes que buscan liberarse de ciertas ataduras sociales impuestas por sus propios países o por imperios más grandes. En este contexto se inserta la escritora de origen vietnamita Nguyễn Phan Quế Mai.

Nació y fue criada en Vietnam, pero recibió una beca del gobierno Australiano para estudiar la universidad. Posteriormente, regresó a su país, pero siguió manteniendo el contacto académico con otras naciones, como el Reino Unido.

Fue así como se dio cuenta de que necesitaba escribir en inglés para descolonizar la visiones de otros países sobre Vietnam, y de esta forma hacer llegar la verdadera historia al resto del mundo.

El canto de las montañas es una saga familiar que relata la vida en la guerra de Vietnam, así como un retrato de sus tradiciones. Leer esta obra es la mejor forma de conocer de primera mano los acontecimientos de este país.

En la literatura de los autores refugiados se encuentra plasmada la historia del mundo. En la lengua en la que deciden escribir, en los lugares desde donde crearon y en las tendencias políticas que reflejaron se puede encontrar un retrato de los diversos conflictos bélicos y sociales.