Tradicionalmente, la cocina ha sido un espacio del que se aleja a los más pequeños de la casa por temor a accidentes o por considerar que no tienen las habilidades necesarias. Todas estas creencias son más bien prejuicios, pues en realidad cocinar es una actividad donde no sólo pueden participar los niños de manera activa, sino que les ayuda a desarrollar competencias necesarias para que en un futuro sean adultos funcionales.

Aquí te explicaremos cuáles son sus beneficios, así como varias actividades para adentrarlos en el mundo culinario.

Los beneficios de cocinar

En primer lugar, la relación directa alimentos y nuestros hijos los ayudará a aprender sobre el origen de lo que consumen e identificar las cualidadesnutritivas de cada uno de sus elementos. Esta interacción les permitirá tener una alimentación más equilibrada y consciente cuando se vuelvan adultos.

Además, de acuerdo con la pediatra Nimali Fernando, la motricidad fina se desarrolla al utilizar instrumentos de cocina y realizar acciones tan sencillas como pasar galletas de una charola a otra. De la mano de esto, la estimulación sensorial es muy valiosa, pues en la cocina tendrán la oportunidad de toparse con texturas y sonidos que normalmente no están a su alcance.

El método Montessori hace mucho hincapié en la participación de los niños en la cocina. Como todo en este modelo de enseñanza, lo que se va desarrollando en cada actividad en realidad tiene un aprendizaje más profundo. Por ejemplo, enseñarles a usar la báscula les da conciencia sobre el peso de los objetos, así como las unidades de medida básicas. Con niños más grandes se pueden practicar las operaciones básicas con sumas, restas, multiplicaciones y divisiones sencillas.

Finalmente, aunque la cocina sí es un lugar donde se manipulan objetos que tienen cierto riesgo, como cuchillos, aspas, aparatos electrónicos y objetos calientes, el hecho de permitirles, de acuerdo a sus capacidades, interactuar con ellos, les brinda mucha confianza y seguridad, así como una evidencia tangible de los logros que van alcanzando.

¿Qué pueden hacer en la cocina según la edad?

A partir de los 2 años los niños pueden participar en la cocina haciendo actividades sencillas, como amasar, untar, poner y quitar ingredientes, entre otras. No les impidas que se involucren en las tareas que les llamen la atención, pero, a su vez, tampoco ejerzas presión sobre ellos: no es posible que lo hagan perfecto todo el tiemponi que lo logren a la primera. Tener paciencia es la clave para que ellos se sigan interesando.

Cuando tienen entre 3 y 4 años son capaces de batir algunas mezclas, cortar con sus dedos, partir y pelar algunas frutas blandas y alcanzar materiales previamente dispuestos por los adultos. Parte fundamental de lo que hará quecocinar sea una herramienta para ser un adulto funcional, es que los niños aprenderán sobre higiene. A partir de esta edad es cuando se les pueden encargar tareas de limpieza.

Después de los 5 años, sus actividades empiezan a complejizarse. Invítalos a cortar, rallar, moler, verter líquidos, secar trastes, poner la mesa y adornar. Aumenta poco a poco la complejidad de las tareas hasta los 11 años, cuando pueden planear comidas, seguir recetas, utilizar electrodomésticos, cocinar con fuego y utilizar el horno bajo tu supervisión.

Asimismo, es recomendable proporcionarles un espacio en el cual puedan escribir las recetas que van aprendiendo, así como los consejos y prevenciones que les das. Como cocinar también es una forma de unir a la familia y hacer actividades en equipo, es recomendable tener un recetario familiar. El journal de recetas de Moleskine es el espacio ideal gracias a la calidad del material y a su comodidad para escribir.

Cómo enseñarles a cocinar

No olvides que, a pesar de que en la cocina se debe crear un ambiente seguro para ellos, siempre hay que supervisarlos en cada una de las tareas que hagan. Además, debemos proporcionarles las herramientas y materias primas correctas para que su participación en la cocina sea más fácil y eficiente.

Para lograr esto, lo mejor es tener claro cuáles son los ingredientes que utilizarán y cuáles tareas esperas que realicen, pues siempre se las debes explicar de forma clara y paciente.

A veces es un poco complicado saber qué habilidades ya son capaces de empezar a desarrollar, sobre todo cuando son tan naturales para ti. Es por esto que te recomendamos apoyarte con materiales de cocina que estén destinados a los niños y que tengan recetas para su nivel.

Por otro lado, si ellos no muestran mucho interés en la cocina, aun así es importante invitarlos a participar de estas actividades para que desarrollen todas las habilidades previamente mencionadas.

Una buena forma para motivarlos es tener un objetivo por el cual cocinar, ya sea una fiesta de cumpleaños o una reunión con sus amigos. En este caso, el libro Cocina para fiestas infantiles está lleno de deliciosas y prácticas opciones que harán que toda la familia trabaje en equipo para crear un menú completo.

Sin duda la cocina es uno de los espacios cruciales donde los pequeños aprenderán las habilidades indispensables para que en un futuro sean adultos funcionales. No tienen que volverse cocineros expertos, pero sí es bueno que crezcan con nociones de higiene, nutrición, responsabilidad y seguridad en su entorno. Te aseguramos que se trata de una tarea muy divertida para toda la familia y muy útil para ellos.