Yo soy Betty, la fea y Jane Eyre, la novela de Charlotte Brontë, tienen protagonistas con semejanzas poco conocidas. En este artículo te contamos qué tienen en común ambas. Betty, la fea ha sido todo un fenómeno de masas. Desde su primera transmisión en la televisión colombiana, en 1999, alcanzó altos niveles de espectadores y ganó muchos fanáticos. Después se retransmitió por todo el mundo y se han hecho, al menos, 30 adaptaciones diferentes (entre ellas, una caricatura). Incluso, su éxito ha trascendido generaciones, y la prueba está en el éxito que ahora tiene en plataformas de streaming.

Póster de Yo soy Betty, la fea (1999). Fuente de imagen: IMDb.

El éxito no es gratuito, hablamos de una historia original con toques de comedia y una protagonista memorable, con quien es fácil empatizar. Por otra parte, Jane Eyre fue un éxito en el ya lejano 1847 en Inglaterra. Firmada con el seudónimo Currer Bell, la novela recibió buenas críticas y se agotó rápidamente el primer tiraje. Las razones: una historia original y una protagonista sui generis para la época.

Retrato de Charlotte Brontë, autora de Jane Eyre. Fuente de imagen: Wikipedia.

Aunque la novela y la telenovela tienen más de 150 años de diferencia y contextos muy diferentes, ambas protagonistas tienen mucho en común. Veamos las semejanzas entre Beatriz Aurora Pinzón Solano y Jane Eyre.

Betty y Jane Eyre: las dos sufrieron bullying

Sí, el bullyingno conoce época ni clase social. A Betty la molestan desde la escuela tanto por su aspecto físico, como por su dedicación académica. En Ecomoda, esto no cambia mucho, ya que Patricia y Hugo Lombardi no dejan de hacerle bromas sobre su apariencia. Asimismo, Jane sufre innumerables maltratos. Durante su niñez, sus primos la molestan por ser huérfana y pobre; luego, en el internado tiene que aguantar la crueldad de las demás alumnas.

Betty y Jane son perseverantes

La principal característica de ambas es su inteligencia y capacidad para resolver cualquier problema. Además, su perseverancia y deseos de superación se ven reflejados en su preparación profesional y no sólo en “6 semestres de finanzas”. Betty es el personaje con mayor grado de estudios, mientras Jane se convierte en institutriz para dirigir una escuela. Sin embargo, a pesar de su preparación profesional, tienen que sobreponerse al continuo menosprecio social. Betty tiene dificultades para encontrar empleo debido a su apariencia física (su belleza es natural), lo que la lleva a tomar un puesto para el que está sobrecalificada.

Debido al éxito de la primera Betty, los fanes realizaron este cartel en el que conjuntan varias de las adaptaciones que han hecho sobre este icónico personaje. Fuente de imagen: @jpabloof.

Por su parte, Jane insiste en permanecer independiente, aunque tenga que ir de un lugar a otro, antes que convertirse en una esposa abnegada. Esta característica en común es la que inicia ambas historias y sostiene las tramas. Después de todo, Betty simplemente pudo desistir a la primera oportunidad y Jane casarse de inmediato.

Jane y Betty: dos mujeres en un mundo de hombres

Sus aspiraciones siempre encuentran obstáculos en otros personajes. Y quienes ellas aman son los dos hombres que más complican sus caminos. En un principio, don Armando y su amigo Mario se refieren de manera despectiva tanto a Betty como a otras mujeres. Por otro lado, don Armando juega con sus sentimientos y la engaña para salvar su empresa recurriendo al fraude.

Charlotte fue una gran escritora, al igual que sus hermanas Anne, autora de Agnes Grey, y Emily, autora de Cumbres borrascosas.

Por su parte, Jane existe en un lugar lleno de prejuicios hacia las mujeres. La educación, la familia y la organización las orillan a casarse muy jóvenes y abandonar sus sueños y aspiración. Pero ella, menos sujeta a los preceptos familiares debido a su orfandad, trabaja como institutriz. Luego, el amor que siente por el señor Rochester entra en conflicto a causa de su enigmático pasado y los malos tratos mediante los cuales reafirma el poder que tiene sobre ella, su empleada.

El amor es el amor

Finalmente, ambas se reconcilian con sus amados. Aunque esto sucede no sin antes alcanzar el éxito. Betty es una profesionista con un importante puesto ejecutivo, reconocida y apreciada por sus colegas. Por su parte, Jane ha heredado una cuantiosa fortuna, luego de tantas idas y vueltas, podría considerarse una mujer de mundo. Es decir, se casan porque son dos personajes completos que han alcanzado sus aspiraciones y no porque utilicen el matrimonio para alcanzar sus sueños (aunque Betty deba cambiar su apariencia física para esto). Si eres fan de Yo soy Betty, la fea, seguramente encontrarás “¡bombi!” la lectura de Jane Eyre. La novela de Charlotte Brontë tiene su propia trama que no podrás dejar hasta terminar; y luego, seguir con Cumbres borrascosas, de su hermana Emily. Así que “Flu flú, ¡voló!”. ¡A leer! Ficha técnica: Jane Eyre