¿Por qué leer poesía a los niños? 6 beneficios cognitivos

Por lo general, cuando pensamos en fomentar la lectura en los niños, las primeras opciones que vienen a nuestra mente son los cuentos infantiles y rara vez consideramos la posibilidad de leerles un poema. Sin embargo, la poesía tiene muchos beneficios en el desarrollo infantil y hoy te hablaremos de ello en esta nota.

Conoce 6 beneficios que aporta leer poesía en el desarrollo y aprendizaje de los niños; así como Mi primer libro de poesíaun título perfecto para comenzar.

La poesía y el lenguaje durante la infancia

La poesía, lamentablemente, está rodeada por una serie de prejuicios o estereotipos que la tachan de inteligible, complicada, elevada o que es solamente para iniciados. Nada más alejado de la verdad.

Aun cuando un texto lírico pueda parecernos complejo en un primer momento, es importante saber que la riqueza de la lectura no radica solamente en entender su significado. Muchas veces estamos tan acostumbrados a trabajar con lo racional, que nos olvidamos de nuestra sensibilidad, es decir, nuestra capacidad para sentir y apreciar la belleza que nos rodea.

La poesía busca, justamente, despertar nuestra capacidad para experimentar el mundo y nuestro lenguaje. En muchas ocasiones podemos no entender del todo lo que dicen los versos y aun así, logramos descubrir la belleza en sus sonidos e imágenes.

Algunos investigadores como Sergio Andricaín, Antonio Orlando Rodríguez y Fernanda Paz, señalan que incluso antes de nacer, los niños se relacionan con la poesía mediante los murmullos que alcanzan a oír desde el vientre. Más tarde, los infantes continúan su contacto con este arte mediante las nanas, los arrullos y las rimas de la tradición oral.

De hecho, durante los primeros años, mientras intentan aprender a hablar, existe una poesía involuntaria en los niños, pues juegan con los sonidos y ensayan diversas maneras de expresar sus ideas sin atarse a las reglas del idioma.

Sin embargo, conforme van creciendo, se les inculca a ver el lenguaje como algo rígido y éste pasa a ser únicamente una herramienta que les ayuda a satisfacer sus necesidades mediante la comunicación. Lo ideal sería que, a la par que se les enseña el idioma, se siguiese fomentando la experimentación de la lengua desde su componente afectivo y lúdico. Y para ello, nada mejor que la poesía.

Seis beneficios de la poesía

Si bien la poesía presenta innumerables ventajas, tanto para adultos como para chicos, aquí te compartimos seis beneficios de leerle poesía a nuestros hijos.

1. Enriquece la imaginación

Los poemas están llenos de metáforas, comparaciones, paradojas y otras figuras retóricas que nos conducen a repensar el lenguaje y el mundo entero. En un poema las estrellas y cometas caben en los bolsillos del pantalón, los pulpos pueden hacer postres de ocho en ocho y los sueños pueden ser ordeñados en la bruma del amanecer. Todo es posible en un poema y la mente del niño todo lo puede imaginar a través de sus versos.

Así, la poesía ayuda a fomentar la inteligencia creativa, necesaria no sólo para el arte sino también en la formación del pensamiento científico y la innovación tecnológica, al igual que en la resolución de conflictos.

2. Estimula el cerebro

A veces, el no lograr entender los versos lleva a la mente a esforzarse por comprender, despertando la curiosidad y convirtiendo al poema en un reto o desafío. Esto ayuda a que el cerebro establezca nuevas conexiones neuronales ayudando a la neuroplasticidad.

Además, el neurólogo Adam Zeman ha observado que el leer o escuchar poesía produce diversas reacciones en nuestro cerebro, sobre todo en el hemisferio derecho, (responsable las habilidades artísticas y creativas, así como de la imaginación) y en la corteza cingulada posterior y los lóbulos temporales, estructuras altamente relacionadas con la introspección.

3. Ayuda a la relajación e introspección

Leer poesía nos sumerge en un estado de relajación o ensimismamiento que nos permite prestar atención a nuestras ideas, percepciones, sentimientos, y asociaciones. El fomentar estos estados de relajación en nuestros niños es especialmente importante en la sociedad actual donde la vida tiene un ritmo acelerado y el mundo está repleto de sobreestimulaciones debido a la presencia constante de las pantallas y el uso de las diversas tecnologías. La poesía es una alternativa ante los dispositivos electrónicos y su sobrecarga de estímulos.

4. Incrementa el lenguaje

Para los niños son especialmente divertidas las onomatopeyas, rimas, repeticiones y juegos de palabras, pues les llevan a explorar los sonidos y a apropiarse del lenguaje. Cuando un niño se adentra a la lectura no sólo aprende palabras nuevas enriqueciendo su léxico, sino que también los poemas a modo de trabalenguas les ayudan a desarrollar sus habilidades fonéticas logrando pronunciar sílabas y sonidos complejos mediante la repetición.

Por ello, no es de extrañar que en las terapias del lenguaje sea habitual apoyarse de canciones, versos, dichos y rimas para incitar a los niños a mejorar su pronunciación y sus habilidades fonéticas. Además, la poesía, al ser lúdica, incita al niño a experimentar con los sonidos y a apropiarse del lenguaje volviéndolo más seguro al momento de expresarse.

5. Desarrolla la memoria

Debido al ritmo y musicalidad de los poemas éstos son de gran ayuda para ejercitar la memoria en los niños y niñas. El placer al momento de oír un poema, así como la sensación de logro al conseguir pronunciar un trabalenguas, puede ir motivando a los niños a memorizar versos o poemas fortaleciendo así su habilidad para retener información mientras juegan con las palabras.

6. Fomenta la sensibilidad

Como hemos visto, la poesía nos permite ver el mundo desde otras perspectivas, reflexionar sobre nosotros mismos y explorar la amplia gama emocional. Un niño que lee poesía no sólo será una persona más reflexiva y creativa, sino también un ser humano más sensible y empático. Además, la poesía es capaz de brindar compañía al lograr poner en palabras el complejo mundo de las emociones. Por ello, quien se acerque a la poesía podrá sentirse entendido y arropado.

Mi primer libro de poesía

Una obra perfecta para fomentar el gusto por la poesía en los niños y brindar todos los beneficios que ofrece este arte es Mi primer libro de poesía. Un precioso libro-álbum que contiene diversos poemas infantiles de autores de renombre como Amado Nervo, Carmen Gil, Federico García Lorca, José Agustín Goytisolo, Álvaro Yunque, Rafael Alberti, Gloria Fuertes, Lope de Vega, entre otros.

Este libro de poesía para niños abre con una bella introducción que les ayudará a los niños a comprender la poesía, y los hará reflexionar sobre el poder de ésta para dar forma a las cosas invisibles como las emociones. Pues, como se advierte en las primeras páginas, ni la tristeza, ni el miedo, ni la alegría se pueden tomar con las manos, no tienen cuerpo ni cara pero, existen, aunque nadie las vea y, por ello, para poder tocar con los dedos del alma esas cosas invisibles, se inventó la poesía.

Mi primer libro de poesía es perfecto para despertar la imaginación de los niños y su gusto por el arte poético. Además sus bellas y divertidas imágenes en gran formato llamarán la atención de todos los niños pues cada poema está acompañado de ilustraciones coloridas que les permitirán re-imaginar los versos.

Este es sin duda uno de los libros más bellos de poesía que les podemos regalar a nuestros hijos. Si tú también quieres estimular sus cerebros, su capacidad de introspección, su memoria, sensibilidad, creatividad e imaginación, así como despertar su curiosidad e incrementar sus habilidades comunicativas, puedes comenzar leyéndoles de vez en cuando algún poema infantil de este precioso libro que les encantará.

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