La neuroeducación es una enfoque innovador que busca solucionar diversos problemas educativos y ayudar en los procesos de aprendizaje. Aquí te hablaremos más sobre qué es y por qué podría beneficiar a tus hijos.

Los especialistas en neuroeducación

Si quieres aprender todo lo que se sabe sobre neurociencia, el doctor Francisco Mora es uno de sus principales investigadores. Entre sus obras se encuentran Neuroeducación y Neuroeducador. Una nueva profesión, productos de años de investigación en el campo de la medicina y la pedagogía.

En estos libros encontrarás mucha información valiosa sobre los últimos avances de la neuroeducación: su definición, importancia, aplicación actual, dificultades, mitos alrededor de ella y cómo deben ser los nuevos profesores.

¿Qué es la neuroeducación?

La neuroeducación es una nueva perspectiva de la pedagogía que se basa en la neurociencia. Su objetivo es integrar los conocimientos sobre el funcionamiento del cerebro e integrarlos a la psicología, sociología y medicina, para aplicarlos en la educación y mejorar así el aprendizaje de los estudiantes y la enseñanza de los profesores.

En el cerebro se encuentran las respuestas de cómo mejorar la memoria, atención y emocionalidad de los niños. A partir de conocimientos científicos, la neuroeducación afirma que se pueden reestructurar todos los elementos de la educación (iluminación de las aulas, disposición de los pupitres, metodologías de enseñanza, trastornos mentales y discapacidades) para crear un ambiente integral más propicio para el aprendizaje.

Gracias a que sus propuestas están basadas en evidencia científica sólida que se ha investigado por años, aplicarla en las reformas educativas se evitaría tomar decisiones basadas en prejuicios.

El funcionamiento del cerebro

La base sobre la que se sostiene la neuroeducación es la neurociencia. Esta especialidad existe desde hace mucho tiempo, pero recientemente se ha empezado a aplicar a otros ámbitos más allá de los laboratorios y quirófanos.

Comprender los alcances de la neuroeducación requiere de un conocimiento profundo sobre la manera en que opera el cerebro, como las etapas en que los bebés aprenden a diferenciar entre lo grande y lo pequeño —cuando utilizan su visión para absorber el conocimiento—; y que los adultos seguimos siendo capaces de aprender y no hay un límite de edad para hacerlo.

Esto no significa que la neuroeducación sólo base la experiencia de todos los seres humanos en elementos fisiológicos. También le da muchísima importancia al aspecto emocional y su influencia en el aprendizaje. Por ejemplo, Francisco Mora explica que la carga genética de cada individuo es fundamental para las capacidades con las que contará a lo largo de su vida, pero el medio ambiente es igual de valioso. No importan las habilidades con las que hayas nacido, si tu contexto no es amigable, amoroso, estimulante y protector, los estragos cognitivos durarán toda la vida. Asimismo, las emociones no atendidas perjudican el desempeño académico.

Este enfoque en el cerebro también permite que los padres y neuroeducadores reconozcan las dificultades y posibles impedimentos desde edades muy tempranas. Los neurólogos, logopedas y psicólogos, a través de la neuroeducación, podrán aplicar sus conocimientos a tiempo para corregir algunas problemáticas que empeorarían con el tiempo.

El neuroeducador

La neuroeducaci��n busca modificar la forma en la que los niños aprenden y la manera en que los maestros enseñan. Ésta es probablemente la mayor complejidad de la nueva propuesta, ya que requiere de neurocientíficos capaces de trasladar sus conocimientos médicos a los profesores, quienes a su vez deben aprender mucho sobre medicina.

El libro Neuroeducador. Una nueva profesión constituye una guia para los docentes que busquen educar de forma integral a través de esta metodología. En general, el neuroeducador deberá tener un conocimiento completo de la anatomía y neurobiología humana, psicología, neurología, neuropsicología y fisiología. Los cursos que estudie tendrán que ayudarlo a aplicar todos esos conocimientos en, por ejemplo, la detección de enfermedades, síndromes o lesiones en sus estudiantes.

Aunque puede parecer una gran cantidad de trabajo, en realidad los maestros están deseosos de incorporar estas estrategias en sus aulas, ya que a largo plazo solucionarán muchas de las dificultades educativas actuales, como rezagos cognitivos o problemas de conducta.

La neuroeducación todavía tiene un largo camino por recorrer, pero se está posicionando como una de las propuestas educativas más integrales. Es posible que en los siguientes años la veamos tomar cada vez más fuerza para beneficio de todos. Te recomendamos acercarte a libros como Neuroeducación y Neuroeducador. Una nueva profesión para que, como padre también incorpores sus innovaciones en la educación en casa.